Estoy realizando mi Servicio de Voluntariado Europeo (a partir de ahora SVE) en República Checa, exactamente en Český Těšín. Mi asociación de acogida es OS AVE y trabajo en su centro de tiempo libre llamado STŘEP, este blog es uno de mis proyectos oficiales de SVE.He decidido llevar a cabo este blog para dar a conocer mi experiencia, en general, en el SVE y, en particular, en esta asociación. En mi primera entrada me gustaría contaros cómo llegué hasta aquí, es decir, el proceso vital que te lleva a realizar un SVE y como llegué físicamente a Český Těšín.
Estudié educación social en Santiago de Compostela y soy monitora de tiempo libre pero al terminar mi época universitaria en España no encontré ningún puesto laboral en mi ámbito profesional y cansada de trabajar de dependienta empecé a buscar fuera de mi país. Fue un proceso muy largo y me plantee diversas opciones, el SVE era el único que me ofrecía la oportunidad de trabajar en mi profesión, conocer otros países, costumbres, idiomas y personas sin suponer un gasto económico muy grande, así que empecé a buscar vacantes (en otra entrada os hablaré de ellas) y enviar curriculums y cartas de motivación por doquier a todas las organizaciones que me interesaban (ayudándome de la página web oficial de la Comisión Europea a la que podéis acceder pinchando aquí, y su database aquí enlazada). Tras muchas entrevistas vía Skype, unos cuantos meses y unas cuantas decepciones, apoyándome en mi familia y amigos para no desistir recibí un e-mail de OS AVE que me ofrecía un proyecto de larga duración, no lo dudé, acepté y ahora estoy aquí, disfrutando de mi trabajo y aprendiendo cosas nuevas a cada segundo.
Respecto a la aventura en sentido práctico, conté con un gran apoyo por parte de mi asociación de acogida, ellos me facilitaron los billetes, los contactos con las otras voluntarias y con mi mentora. Fue un día realmente largo e interesante, decidí hacer este viaje yo sola, para sentirme capaz de moverme por el mundo, o por lo menos por Europa yo sola y la verdad, me resultó muy sencillo y gratificante. Donde más tiempo perdí fue en Santiago de Compostela, donde pase la seguridad del aeropuerto, a partir de ese momento todo fue viajar y esperar. La compañía era de bajo coste, eso es verdad, pero soy joven y no muy grande así que no tuve problemas de espacio, en el vuelo de Barcelona a Praga coincidí al lado de una chica de Granada que estudiaba en Praga con la beca Erasmus, me dio algunos consejos sobre la ciudad, los taxis y donde esperar el bus del aeropuerto a la estación de tren. En la estación de tren pude comer y leer unas cuantas páginas del libro que llevaba, la mejor compañía para los viajes largos. El tren fue lo mejor del viaje, café y agua gratis, un asiento de cuero muy cómodo, enchufes y Wifi a mi disposición, una atención excelente y una carta realmente barata.
Al llegar a mi destino una representante de la asociación y mi mentora estaban esperándome, fueron muy cercanas y cariñosas, teniendo en cuenta la forma de ser europea, muy diferente de la española. Me llevaron en coche hasta casa, donde conocí a mi nueva compañera, Silvia, de Málaga (Haré una entrada sobre ella y su proyecto en STŘEP). La casa es pequeña y cómoda para las dos, mi habitación enorme y la calefacción una maravilla, en República Checa es habitual tener el baño separado de la ducha y el lavabo, algo que choca al principio pero que resulta muy práctico e higiénico. Era hora de descansar el viaje sin poder contener la ilusión por mi primer día de trabajo.
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