
De repente todo son bicicletas, patines y personas practicando tenis y fútbol cerca del río. En el parque hay un bar pequeño pero con una terraza muy bonita, puedes pedir tu consumición y sentarte en el césped y hacer tu propio pic-nic. En definitiva es como si la ciudad despertase después del letargo del invierno, aunque hayamos vivido un invierno muy cálido en realidad.
Acompañando toda esta actividad y este cambio llega un festival de cine que se celebra en las dos partes de la ciudad, su nombre "kino na hranici" hace honor a este hecho ya que su significado es cine en la frontera. Decidí no acudir al festival, por motivos de dinero, como voluntario europeo siempre tienes que pensar muy bien a que vas a dedicar tu dinero de bolsillo, y porque tratándose de películas checas y películas polacas había muy pocas posibilidades de enterarme del argumento. Pero mirando el programa descubrimos que cada día del festival al final del visionado de las películas ofrecen un concierto en el parque de Cieszyn donde se encuentra la Torre del castillo de Piast.
Con esta información y siendo festivo el día siguiente, uno de Mayo, día de los trabajadores, quedamos unos pocos voluntarios que vivimos en Český Těšín aunque trabajamos en diferentes organizaciones para un poco de música al aire libre.

Magnifica idea, no pudo salirnos más redondo el cambio de plan, al llegar en las puertas tenían el cartel que podéis ver a la izquierda de estas lineas, se trata de un festival de música llamado "More Space Festival", en un local pequeño, organizado por un pequeño club de amigos llamado Kogucik, un club de música y filósofos, tal y como pone en su página de facebook.
Esta siendo un festival genial, intimo, donde estamos disfrutando de todo tipo de música y de artistas polacos, con gente muy amable con la que poder entablar conversación, siempre en ingles, claro. Ayer, jueves día uno de Mayo, pudimos disfrutar de tres conciertos acústicos muy buenos, personalmente el tercero fue más de mi agrado, dos chicos jóvenes con una guitarra y un violonchelo, nos deleitaron con versiones muy creativas de canciones inglesas y polacas. Sin lugar a dudas, este festival ha sido uno de mis mejores descubrimientos desde que estoy con el Servicio de Voluntariado Europeo, todos lo que tengáis oportunidad os recomiendo acudir y al resto guardarlo en vuestras retinas para futuras ediciones, tiene todas las papeletas para convertirse en un gran festival. Animo a los organizadores y que no decaiga, aun quedan dos días de música.
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